Puede que en los próximos días tu entidad bancaria te llame para recomendarte comprar acciones o participaciones preferentes.
Es importante que leas estas líneas para saber si este producto te conviene ya que tecleando en Google “CNMV Acciones preferentes” toparás con advertencias tipo: “La CNMV informa al inversor de que las participaciones preferentes tienen un elevado riesgo que puede generar rentabilidad, pero también pérdidas en el capital invertido”.
¿Qué son?
Son valores mobiliarios representativos del capital social de una entidad (lo que los aproxima al concepto de renta variable), si bien otorgan a sus titulares una remuneración predeterminada (fija o variable), condicionada a la obtención de suficientes beneficios distribuibles por parte de esta sociedad.
¿Qué aspectos se deben tener en cuenta?
Son perpetuas, es decir que no tienen vencimientos predeterminados como los Bonos y/o obligaciones, aunque el emisor puede acordar la amortización (la recompra) una vez transcurridos al menos cinco años desde su desembolso. Esto fomenta que el inversor no tiene ningún control sobre el horizonte temporal de su inversión y no puede planificar cuándo recuperará su inversión inicial.
Es frecuente que la entidad asegure una liquidez diaria en caso de querer vender el título pero esto no es exactamente así, pues la entidad debe encontrar un potencial comprador entre su red de clientes y el precio puede estar muy alejado de su valor inicial. Además el Banco/Caja no puede adquirirlas directamente en su autocartera, porque ese activo no podría computar como Capital Propio (objetivo último de estas emisiones). En la práctica son pues valores muy poco líquidos.
En caso de quiebra de la entidad, estos títulos se sitúan en el orden de recuperación de los créditos por detrás de los acreedores ordinarios y por delante de las acciones ordinarias (y de las cuotas participativas en el caso de las cajas de ahorros).
El gancho de la rentabilidad inicial suele ser el factor decisivo a la hora de convencer a un cliente pero no es oro todo lo que reluce y no siempre son explicados adecuadamente por los astutos comerciales.
Para calcular el rendimiento de estos títulos hay que tener en cuenta 2 factores:
1) el cupón anual que suele oscilar entre el 6,5% y el 8,25% en sus primeros años para posteriormente ofrecer una rentabilidad fija en función de un interés de mercado (Euribor + diferencial).
2) El segundo factor y más importante: hay que tener en cuenta la diferencia de precio entre el inicial y el cotizado en el mercado. En las últimas recompras realizadas por los bancos a sus clientes y en un alarde de “generosidad” han llegado a pagar tan solo el 40-50% de su valor inicial ocasionando fuertes perdidas a sus clientes.
El inversor debe pues contemplar un horizonte temporal muy largo (10-15 años mínimo) para tener más posibilidades de salir airoso.
En mi opinión, el rendimiento esperado que ofrecen estos activos es, en muchos casos, insuficiente para compensar los múltiples riesgos que implican pero debo reconocer que existen buenas oportunidades en las emisiones emitidas hace años y que cotizan muy por debajo de su valor de partida. En estos casos las rentabilidades potenciales puede llegar al 10%-12% anual para plazos de 10-15 años o incluso mayor si tenemos la suerte que la entidad decida recomprarlas durante este periodo.
¿Porqué venden este producto los Bancos?
Si revisas mi escrito del pasado 01/04 (¿Cómo escoger Banco/Caja en tiempos de crisis?) encontrarás un gráfico muy elocuente que plasma la solvencia y el ratio de morosidad de gran parte de las entidades financieras españolas. Es publico y notorio que todas las entidades de crédito de nuestro país necesitan recapitalizarse y encuentran en estos títulos la manera más ventajosa para hacerlo ya que el importe captado les aporta liquidez en sus balances, últimamente muy deteriorados por la crisis, y Capitales Propios que les refuerza el ratio de solvencia.
Desde diciembre de 2008, cuando BBVA inauguró la nueva oleada de este tipo de colocaciones, Bancos y Cajas han lanzado al mercado 4.000 millones de euros en participaciones preferentes. La cifra, se dispara en los próximos días ya que La Caixa y Caja Madrid lanzan esta semana una oferta de Preferentes por importes 2.000 y 3.000 millones respectivamente…aviso a navegantes.
Advertencias:
Standard&Poor’s, rebajó a principios de abril el rating de las emisiones preferentes y deuda subordinada de 60 entidades europeas, entre ellas, nueve españolas (Santander, BBVA, Popular, Banesto, Sabadell, Bankinter, La Caixa, Caja Madrid e Ibercaja). La firma de calificación advirtió sobre la posibilidad de que la banca suprima los intereses que paga por sus emisiones con el objetivo de reforzar su capital. S&P cree que esta restricción podría incluso ser impuesta por los gobiernos, para preservar la liquidez y la solvencia de las entidades.
Remito el testimonio de una inversora en preferentes en un foro financiero:
“Me parece genial que hayas comprado esas preferentes de Caja España, sabes a lo que te arriesgas, y lo asumes, además el interés y el diferencial posterior es muy bueno. Desgraciadamente, cuando yo compré las preferentes no conocía el producto (y no tenían una rentabilidad tan alta), yo creía que estaba comprando un Bono con un vencimiento determinado, y ahora me encuentro con papelitos que algunos no valen nada, y otros valen muy poco, y a saber si cobraré el cupón. De quien es la culpa, algunos pensarán que es mía por comprar productos para los cuales no tenía una cultura económica adecuada, pero si ahora os digo que yo cuando entré por la puerta del banco mis palabras fueron: "quiero un producto con el capital 100% seguro, con una rentabilidad fija y un vencimiento a 4-5 años.
Bueno cada persona tendrá su propia opinión, pero esta es mi verdad y yo creo que mi banco y sus comerciales (que no asesores) no obraron correctamente y si me apuras con no muy buena fe”.
Conclusión:
Las preferentes son para inversores con miras a 10-15 años mínimo que no necesiten deshacer su inversión con anterioridad y sobre todo que estén preparados para soportar fuertes variaciones en el precio. Hay que intentar comprar las emisiones emitidas hace unos años que ofrezcan un cupón (interés) atractivo y que coticen muy por debajo (50%) de su valor inicial en empresas con buenos fundamentales para reducir el riesgo de impago del cupón. Estos son los elementos necesarios pero a veces no suficientes para obtener una buena inversión a largo plazo en este tipo de activos y es el mensaje que hay que trasladar a nuestra entidad.
13 comentarios:
Gracias por tus comentarios tan esclarecedor de las participaciones preferentes, de los que más o menos tenía constancia. Sin embargo, y teniendo en cuenta mi incultura financiera -si bien soy consciente de ella- me gustaría hacerte una pregunta puesto que una caja de ahorros con la que trabajo me ha hecho una "oferta": se trata de las obligaciones subordinadas; ¿podrías decirme cual es la diferencia con las participaciones?
Gracias de antemano.
Joan Carles
Joan Carles,
Sobre tu pregunta sepas que las Subordinadas se parecen mucho a las preferentes pero tienen algunas diferencias:
En la prelación de créditos la subordinada pasa a cobrar antes que las preferentes pero después de los acreedores ordinarios.
Existe una fecha de amortización explicita a 5,10,15 o 20 años...distinto de las preferentes.
A parte de esos dos puntos diría que en todo el resto sigue valido lo de mi escrito...
Kernan
Gracias por tu aclaración. Lo tendré en cuenta cuando la Caja se me dirija de nuevo con su oferta (?).
Te seguiré por el blog.
Joan Carles
kkkeeeeerrrrrnnnnaaaaannnnnn !!!!!!!
que ens ensorres el negoci !!!!!!!!!
malgrat tot ... una abraçada ...
jaume ;-)
Si tota la banca venguessiu el producte com cal (no dubto que tu ho fagis) pues no hauria de surtir gent com jo a explicar com funcionen...
Abraçada
Muy bien explicado todo pero me queda una duda, cando la empresa amortice las preferentes a los 10, 15, o 30 años, va ha pagar el 100% del nominal? Por que si es así comprarlas el mercado secundario al 40% es un chollo si eres joven y la empresa es solvente y de calidad.
Un saludo, FERNI
Si, en efecto funciona tal como lo dices y por tanto puede haber buenas oportunidades!
Un saludo
Teniendo en cuenta el enorme apalancamiento con que suelen operar los bancos, la prelación del credito es insignificante.
Tienes razón sobre el apalancamineto, però no sé a qué conclusión quieres llegar. Kernan.
Спасибо понравилось ! Thanks !
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Thanks за материалы! :)
Respect blog.kernanheinz.es
Hola amigos , acabo leer ahora este escritura en este blog , gustó está contribuyendo dando gran información !
Gongratulation , Buenas noches y tener un gran 2011! Lo sentimos por mi mala español!
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